lunes, 4 de agosto de 2008

El amante

La amó apasionadamente, como nunca nadie ha amado. Sus largas piernas de piel suave eran la imagen hecha carne de la lujuria; pasaron días haciendo el amor y susurrándose mentiras al oído, promesas de un futuro en común, que ambos reconocían inexistente.

Todo acabó una triste mañana de enero, cuando el viento frío golpeó la ventana, cuando la lluvia los visitó por última vez.

Hoy viven por separado, con diferentes formas de amar y entender la vida, todo se ha olvidado, o... ¿tal vez no?.

No hay comentarios: